TOLUENO
UN BUQUE CON BANDERA ESPAÑOLA
110
metros de eslora |
25
años de antigüedad |
Tripulación: 18 personas |
ESTE BUQUE
PERTENECIENTE A LA NAVIERA QUÍMICA, S.A., QUE ATRACÓ EN EL MUELLE TURIA
SUR DEL PUERTO DE VALENCIA, VERTIÓ AL MAR
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C.A.E. SOLICITÓ A LAS AUTORIDADES UN CONTROL CORRECTO EN LA GESTIÓN DE LOS RESÍDUOS QUE TODAVÍA CONTENÍA EL BUQUE, PARA EVITAR QUE EN EL TRAYECTO HASTA EL PUERTO DE GANTE, EN BÉLGICA, FUERAN VERTIDOS AL MAR DE FORMA ACCIDENTAL O NO.
AUTORIDAD PORTUARIA
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Miembros
del C.A.E. se personan en el puerto para recabar información al respecto de la fuga de
ácido sulfúrico del buque Tolueno que ha podido derivar en consecuencias desastrosas
para el medio ambiente por la particularidad del producto.
Los
Guardamuelles del Puerto son ese día la máxima autoridad en todo el recinto portuario,
por lo que se les solicita información sobre las consecuencias del vertido de ácido al
mar.
Los
Guardamuelles se niegan a dar información de cualquier tipo relacionado con el Tolueno y
sus vertidos de ácido.
Se
les comunica a estos funcionarios que la información de carácter ambiental es pública y
por lo tanto tienen la obligación de ir identificados e informar sobre los responsables a
los que dirigir nuestros escritos de reclamación.
Su
negativa a nuestras solicitudes de información nos lleva a presentar denuncia ante el
Juzgado de Instrucción SIETE de Valencia en funciones de Guardia.
15 de diciembre de 2000
Se solicitó por escrito al presidente de la Autoridad Portuaria
información sobre el vertido y destino de la carga tóxica que transportaba el Tolueno. A
fechas de junio de 2001 todavía esperamos respuesta.
CONSELLERÍA DE MEDIO AMBIENTE
Otro
escrito en la misma fecha de diciembre y de características similares alertando de la
peligrosidad del ácido, fué dirigido al Servicio de Gestión de Resíduos de la
Consellería de Medio Ambiente, que se desentendió de cualquier responsabilidad alegando
la autonomía que caracteriza la gestión del Puerto.
CONSECUENCIAS
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El buque descargó en el puerto de Castellón el ácido que había recogido en Avilés, y en ese trayecto, frente a las costas de Portugal, un fuerte temporal dañó algunos contenedores que contenían varias toneladas de ácido sulfúrico y provocaran el derrame de esta sustancia por la estructura interna del buque. No obstante, y a pesar del accidente, el capitán aseguraba que no había presencia de restos de ácido en el mar, pues éstos fueron a parar a otro tanque y en ningún momento entraron en contacto con el agua ni con la estructura interna del buque.
Lo
cierto es que al derramarse la carga de ácido sulfúrico y mezclarse con el agua, ha
producido en los tanques, tuberías y otros elementos metálicos del buque, daños de
importancia.
Los
responsables llegaron a utilizar hasta ocho toneladas de bicarbonato para neutralizar el
ácido.
Un tripulante tuvo que ser ingresado en
un hospital al inhalar gases tóxicos en el buque Tolueno que permanece inmovilizado en el
puerto de Valencia tras sufrir un derrame interno de ácido sulfúrico.
El
capitán del buque Felipe Cano, aseguraba que el Tolueno no ha derramado ningún tipo de
sustancia tóxica en aguas del recinto portuario
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Un
segundo expediente se inició por dos presuntas infracciones graves a la
seguridad marítima, con sanciones cada una de ellas de 30 millones de pesetas.
La
revisión por técnicos del quimiquero Tolueno llevaron a la conclusión de que las
reparaciones eran de tal envergadura que se tenían que realizar en un astillero y en
dique seco.
El
poder corrosivo de este ácido derramado por el interior del casco, estaba perjudicado
seriamente las tuberías de conducción y otras partes del buque que obligaban a la
inmovilización del mismo y ser reparado en dique seco, por ello, y a pesar del aviso de
Capitanía Marítima, los armadores vertieron al mar el ácido sulfúrico
acumulado en los cofres, lo que provocó que Capitanía obligara a detener el
achique y ordenara la inmovilización del buque.
Según fuentes de la tripulación, los armadores vaciaron al mar parte de la sustancia para evitar que se denegara la salida del buque.
Otro
resto del ácido mezclado con agua fué trasvasado a un contenedor de acero inoxidable.
EL BUQUE CARGÓ UREA
Posterior al desastre, el Tolueno estuvo cargando 2.250 toneladas
de un producto irritante, la urea formaldehíde con destino a Gante (Bélgica) pero las
graves averías sufridas por el escape de ácido sulfúrico, y su nuevo destino a los
astilleros, obligaron a trasvasar de nuevo la carga.
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Lamentable actuación de los Guardamuelles del Puerto al negar
información medioambiental.
Lamentable
actuación del Servicio de Gestión de Resíduos de la Consellería de Medio Ambiente que
se desentiende del destino de toneladas de ácido sulfúrico que se descargaron en el
puerto de Castellón.
Lamentable
Autoridad Portuaria que pretende ignorar nuestras solicitudes de información
medioambiental.
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PESO MOLECULAR: 98.08 g/mol. FORMULA: H2SO4. COMPOSICION: H: 2.06 %; O: 65.25% Y S: 32.69 % Es un líquido de consistencia oleosa, incoloro e inodoro que resulta de la oxidación del anhídrido sulfuroso. Tiene una gran afinidad por el agua, pudiendo absorberla del aire y de muchas sustancias orgánicas. Si se mezcla con ella desprende una gran cantidad de calor. En la industria química se le utiliza en la elaboración de fertilizantes, explosivos, colorantes, en el refinado del petróleo, en la producción de hierro y acero, secado de papel y pegamentos, entre otros. En el laboratorio se usa como ácido fuerte, agente oxidante, deshidratante y en síntesis orgánica. Corroe metales y tejidos, carboniza a la madera y a otras materias orgánicas, sin embargo es no inflamable. En el caso de tener disuelto SO3, se le conoce como ácido sulfúrico fumante. Fumante: Corrosivo, venenoso. Se le conoce tambien por: Aceite de vitriolo, Sulfato de dihidrógeno. PROPIEDADES FISICAS: Punto de ebullición: 290 ºC. Punto de fusión: 10.49 ºC Densidad (15/4 ºC): 1.1 (13.13 % en peso); 1.3 (37.5%); 1.5 (70.63%); 1.7 (75 %) y 1.8 (85 %). Densidad de vapor (aire=1 g/ml): 3.4 g/ml Punto de congelación: ácido anhidro: +10 ºC; 98 %: +3 ºC; 93 %: -32 ºC; 78 %: -38 ºC; 74 %: -44 ºC y 65 %: -64 ºC. Presión de vapor (a 145.8 oC): 1 mm de Hg Solubilidad: Miscible con agua y etanol con generación de calor y contracción del volumen. Por ello, al diluirlo: AGREGAR EL ACIDO AL DILUYENTE CUIDADOSAMENTE. PROPIEDADES QUIMICAS: Productos de descomposición: óxidos de azufre. Se ha informado de reacciones violentas entre el ácido sulfúrico y: -Alcohol bencílico a 180ºC,
ciclopentadieno, oxima de ciclopentanona, 1,3-diazidobenceno, peróxido de hidrógeno,
nitruro de mercurio, amida nítrica, nitrometano, permanganato de potasio, oxidantes de
polisilineno, potasio, sodio, permanganato de plata, con peroxocromato de plata (a -30ºC)
y acetonitrilo El ácido diluido, en contacto con objetos metálicos genera hidrógeno. La carbonización de azúcar con H2SO4, produce monóxido de carbono, y se produce dióxido de azufre al tratar cobre con este ácido, por lo que estas reacciones son consideradas peligrosas para usarlas como experimentos escolares. NIVELES DE TOXICIDAD: Concentración en el aire bajo la cual hay serios efectos a la salud o incluso la muerte por una sola exposición en un cierto tiempo: 0.008 g/m3. RIESGOS: Riesgos de fuego o explosión: Este compuesto no es inflamable, sin embargo es muy reactivo y capaz de prender material combustible que se encuentre finamente dividido. Al calentarlo emite vapores tóxicos. Debe evitarse el contacto del ácido concentrado con agua y otros productos con propiedades químicas. Riesgos a la salud: El H2SO4 es extremadamente irritante y corrosivo de los tejidos, causando destrucción y quemaduras rapidamente. La acción tóxica general del ácido sulfúrico es una pérdida de alcalinidad en el cuerpo, es decir, una acidosis que afecta al sistema nervioso, provocando agitación, caminar lento y debilitamiento. La inhalación de vapores de este ácido causa aumento de la velocidad de respiración, irritación de la nariz y traquea, estornudos, tos y secreción nasal. La exposición a concentraciones altas causa edema traqueobronquial, pulmonar y en laringe, ulceración de mucosas de nariz y boca, bronquitis crónica, hematemesis, gastritis, dolor en el pecho e incluso, neumonia. Si los vapores son desprendidos por ácido caliente o por oleum, puede producir una rápida pérdida de la conciencia y daños severos en los pulmones. La exposición constante de vapores de este ácido provoca traqueobronquitis, estomatitis, inflamación de la parte superior del tracto respiratorio, frecuentes infecciones respiratorias, enfisema y problemas digestivos. En algunos trabajadores expuestos a concentraciones entre 12.6- 35 mg/m3 se ha observado erosión y decoloración dental. Por otra parte, la exposición constante por períodos prolongados ha producido síntomas de bronquitis, rinorrea y epistaxis. Contacto con los ojos: El ácido sulfúrico es un irritante severo de los ojos. Salpicaduras de este ácido en los ojos produce ulceración y erosión de la córnea, querato-conjuntivitis e incluso ceguera. Contacto con la piel: En este caso, las quemaduras químicas son las lesiones mas comunes. La acción deshidratante del ácido concentrado produce quemaduras similares a las producidas por el calor. El área de contacto inicialmente se blanquea, después se pone café y posteriormente, se producen úlceras en cuyo contorno la piel se enrojece. Las heridas sanan lentamente ( deberán controlarse limpieza y asepsia ) pueden dejar cicatrices apreciables. Las quemaduras grandes pueden causar shock, colapso, síntomas como los causados por otro tipo de quemaduras e incluso, pueden ser fatales. Por otra parte, el ácido diluido es un irritante de la piel también y un contacto constante puede causar dermatitis, ulceración de manos e inflamación purulenta alrededor de las uñas. En pruebas con humanos se ha observado que ácido al 10 % genera una marcada irritación en la piel. Ingestión: Este ácido por ingestión causa quemaduras serias en la boca, perforación del esófago y estómago, peritonitis y colapso circulatorio. Estos últimos son, generalmente, los causantes inmediatos de muerte. Los síntomas son: salivación, sed, dificultad para tragar, dolor, shock y vómito café. ALMACENAMIENTO: Debe mantenerse alejado de agua, carburos, cloratos, fulminatos, nitratos, picratos, metales en polvo y materiales combustibles y protegido de daños físicos. |
FUENTES: Propias, medios de comunicación, Autoridades Portuarias, y Consellería de Medio Ambiente.
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